Cuando se trata de escoger gafas protectoras para nuestros ojos que mantengan seguros estos órganos cuando realizamos algún trabajo o actividad de riesgo para nuestra visión, no solo debemos tener en consideración el grado de protección que ofrece el fabricante de acuerdo a las normas vigentes en materia de Salud Ocupacional e Higiene del Trabajo, también deben tenerse en cuenta otros aspectos como la interacción de las gafas con otros medios de protección individual que estemos utilizando como por ejemplo orejeras, tapones contra ruidos o respiradores.

Otro detalle importante es su comportamiento ante las condiciones ambientales circundantes, por ejemplo, debes saber si limitan la visibilidad por formarse una neblina sobre la superficie transparente de las gafas al ocurrir cambios de temperatura. Por último, y no por eso menos importante, la comodidad de las gafas y su facilidad para ponérselas y quitárselas, debe ser otro punto que no debemos obviar en la selección del modelo más idóneo para la protección de nuestros para una actividad o trabajo determinados.

Conocer los fundamentales tipos de protección que ofrecen las gafas de seguridad ofertadas en la actualidad en el mercado también debe serte útil para elegir la más conveniente a tus necesidades.

Con protección total del rostro

Visera especial que cubre completamente el rostro. Ofrecen una gran protección en actividades o trabajos con riesgo de generar partículas volantes a elevadas velocidades y salpicaduras de productos químicos peligrosos. Protegen una gran área y no se empañan cuando ocurren cambios bruscos de temperaturas.

Gafas contra salpicaduras de productos químicos

Diseñadas para protegernos de ambientes de trabajo donde se generen salpicaduras y vapores de sustancias peligrosas. Cubren totalmente los ojos impidiendo que estos sean afectados por los elementos y gases agresivos del entorno.

Gafas protectoras contra impactos

En la elección de este tipo de gafas de tenerse muy en cuenta la velocidad a la cual se mueven los fragmentos de los cuales nos queremos proteger. Recuerda que mientras mayor velocidad tenga uno de estos objetos, mayor será la posibilidad de que desplace las gafas y nos provoque un indeseable accidente.

La necesidad de proteger nuestros ojos contra impactos

Las gafas protectoras o espejuelos de seguridad son la protección mínima indispensable cuando existe el riesgo potencial de que partículas volantes del entorno puedan dañar nuestros ojos. Este riesgo está presente en la mayoría de los trabajos mecanizados como aserrar madera, soldar, trabajos en torno, etc.  En trabajos como estos suelen utilizarse otros medios de protección individual además de las gafas contra impacto como son las mascarillas, caretas y respiradores que pueden interferir con el correcto montaje de los espejuelos y disminuir el grado de protección que estos ofrecen.  Por esta razón es recomendable evaluar previamente si para el trabajo que vamos a realizar lo más conveniente son las gafas protectoras contra impactos o una visera que proteja toda la cara, por ejemplo.

Limitaciones

Las gafas contra impacto no ofrecen protección suficiente contra explosiones violentas como las que ocurren por la reacción de compuestos químicos. Para esto tendrás que procurarte algún dispositivo que funcione como escudo entre el aparato que puede causar explosión y tu cuerpo. Algunas gafas protectoras, especialmente las fabricadas en plásticos, suelen rayarse y llegar a limitar la visión agregando un nuevo riesgo a los propios del trabajo que estas realizando.

Cuidados y mantenimiento

Las gafas y espejuelos de protección se limpian con agua y un jabón suave, luego se secan con un trapo que no deje pelusas y se guardan en un lugar seco y temperatura fresca. Evita colgar las gafas por la banda elástica de sujeción para evitar que esta pierda su tensión y no ajuste correctamente en tu rostro. No permitas el contacto directo de los espejuelos con agentes químicos, biológicos o mantenerlas cerca de material radioactivo.